Expedición 206
He aqui un poco de él.
EL SUEÑO DE VIAJAR POR TODO EL MUNDO
Debo haber tenido 5 años la primera vez que pensé: “quiero viajar por todo el mundo”. Y desde entonces ha sido un deseo con el que he vivido toda la vida. Siempre he sabido –en cada fibra de mi ser- que tengo una necesidad genuina de andar por los caminos más diversos de este planeta tierra.
¿Por qué necesidad? Se preguntarán ustedes. Para no echarles un rollo que a la tercera línea los tenga mareados, confundidos y al borde de caerse del sueño, quiero decirles que siempre he sabido que hay algo que une a todos los seres de este planeta (sí, lo sé: para este punto ya estoy empezando a sonar muy hippie).
Para mí ese algo es un lazo que nos une y que nos hace formar parte de un todo. Sin embargo, en cada país, en cada región, en cada cultura (e inclusive en cada ser humano) ese lazo se manifiesta de una manera distinta.
Así pues, desde siempre he querido encontrar qué es lo que nos une cómo seres humanos. Siempre he creído que conociendo a muchísimas personas de diferentes culturas, a lo largo y ancho de este mundo, es que podré con lograr dicha meta. Quiero ver qué es lo que nos hermana, qué es lo que, a pesar de las diferencias y las discrepancias, hace que seamos un espejo el uno del otro. Pero no sólo eso: el simple hecho de poder a muchos seres humanos constituye una lección de vida muy enriquecedora.
Buscar qué hace felices a los seres humanos es, a final de cuentas, eso: emprender una búsqueda de qué es lo que –sin importar si nos encontramos en México o en Zimbabwe; en Puerto Rico o en China- nos une cómo seres humanos.
Sé que en estos momentos eso es de suma importancia para todos y cada uno de nosotros: poder regresar la mirada a las cosas sencillas, a las cosas que nos hacen felices, a las cosas que nos unen. Durante mucho tiempo hemos tenido una forma de ver la vida en la que sólo hemos estado pendientes de lo que nos separa y de lo que nos hace infelices.
Es hora de cambiar nuestra forma de ver la vida y las cosas. Cómo dice el refrán “más vale tarde que nunca”. Por eso es que, a pesar de que por todos lados se anuncie tormenta, tengo la esperanza de que pronto podremos ver un mundo muy distinto al que estamos acostumbrados. La idea de realizar una misión cómo ésta me emociona a más no poder: siento que podré compartir ese mundo inmenso que hay allá afuera con ustedes y espero que eso, a final de cuentas, nos abra los ojos a nuevas posibilidades.
Ayúdame a lograrlo, si te gusta mi sueño, por favor dile a todos, ayúdame a que todos lo sepan… voten por mi y por mi equipo:
No hay comentarios:
Publicar un comentario